Después de
ir con José a mirar el espigón para ver el estado del mar y consultar infinitas
veces las previsiones de todas las webs
conocidas, queriendo ver que mejoraba el tiempo, nos ha parecido que podíamos
salir por lo menos hasta Bari , que son unas 26 millas.
A las 10:10
HRB salimos por la bocana de Monopoli, el viento es de unos 15 nudos totalmente
a fil de roda, por lo que decidimos que no pondremos ni la mayor. Hay un velero
que va justo delante nuestro que tampoco no la lleva.
Al cabo de
una hora el viento empieza a subir sobre los 23 nudos reales -F5-6 y el mar se
levanta un poco más.
El Lohanii empieza a dar pantocazos, a 2200 vueltas, apenas hacemos 3 nudos.
Como queremos avanzar y no nos planteamos hacer un bordo, subimos a 2600 revoluciones y vamos a 4-5 nudos.
Cada pocos minutos un pantocazo nos detiene y nos envía una buena ducha de agua salada a los cuatro.
El Lohanii empieza a dar pantocazos, a 2200 vueltas, apenas hacemos 3 nudos.
Como queremos avanzar y no nos planteamos hacer un bordo, subimos a 2600 revoluciones y vamos a 4-5 nudos.
Cada pocos minutos un pantocazo nos detiene y nos envía una buena ducha de agua salada a los cuatro.
Cuando parecia que iba a dar una cabezadita en popa, una ola me recuerda que ahora no toca. Me chorrea de arriba a abajo. ¡¡¡¡¡Me ha quitado hasta las gafas!!!!!
Así durante
4 horas.
No podemos cerrar las pestañas de la cantidad de sal que tenemos en la cara y el pelo.
No podemos cerrar las pestañas de la cantidad de sal que tenemos en la cara y el pelo.
Cuando empezamos a divisar Bari, el viento baja progresivamente hasta los 14 nudos y el mar se calma un poquito.
En la bocana este mastodonte nos obliga a dar media vuelta y esperar nuestro turno:
Entramos en
el puerto comercial de Bari a las 15:35 hay casi una milla del espigón hasta el
amarre.
Otra vez amarrar con viento lateral y sin ningún barco a sotavento.
Afortunadamente todos los vecinos vienen a ayudarnos y poco a poco ponemos el barco en su sitio.
Otra vez amarrar con viento lateral y sin ningún barco a sotavento.
Afortunadamente todos los vecinos vienen a ayudarnos y poco a poco ponemos el barco en su sitio.
Quedándonos
3 noches nos cobran a 39 euros cada día. (si no 54 euros 1 dia)
Es la marina
del Cantieri Ranieri.
Está lejos del centro, a unos 3 Km., pero tenemos autobuses y estamos muy cómodos en esta marina.
Está lejos del centro, a unos 3 Km., pero tenemos autobuses y estamos muy cómodos en esta marina.
Hoy comemos
pulpo que compró José en el mercado de Monópoli y que ha cocinado él mismo.
Muy, muy bueno.
Muy, muy bueno.
Por la tarde
nos vamos a buscar el bus para Bari.
En la parada, preguntando por los buses, nos encontramos con Lucia, que nos explica cómo funcionan las líneas y como vamos en su misma dirección, nos acompaña.
En la parada, preguntando por los buses, nos encontramos con Lucia, que nos explica cómo funcionan las líneas y como vamos en su misma dirección, nos acompaña.
Llegamos al
centro y como dice que tiene un tiempo libre hasta coger otro bus para su casa, dice que nos va a hacer de guía por el
casco antiguo.
Habla muy rápido,
por lo que nos cuesta entenderla.
Nos lleva a probar unos pastelitos salados típicos de aquí, hechos con harina de maíz que se llama “Polenta frita”. Muy buenos.
Luego nos lleva a probar una freidoría, “casa Maria” con la que tiene amistad y nos tomamos unas patatas fritas recién hechas, exquisitas.
Nos lleva a probar unos pastelitos salados típicos de aquí, hechos con harina de maíz que se llama “Polenta frita”. Muy buenos.
Luego nos lleva a probar una freidoría, “casa Maria” con la que tiene amistad y nos tomamos unas patatas fritas recién hechas, exquisitas.
Callejeamos,
nos enseña la catedral y la iglesia de San Nicolás ¡preciosas!
para terminar en una pizzería de
unos conocidos suyos, Mauro di Cosimo, en Largo Albicocca, 19, donde comemos
una pizza deliciosa de pasta fina para merendar (todo el día comiendo).
Seguimos a la guia turística improvisada que nos lleva por todas partes.
De postre nos lleva a una pastelería (Martinucci) donde trabaja una amiga suya,
y nos hinchamos a pasteles en plan
delicatessen. Después nos enseña el paseo marítimo y ya se despide de nosotros.
Lucia es un encanto.
Han pasado dos horas y parece que nos conozcamos de siempre.
Nos intercambiamos teléfonos y correos y un abrazo de despedida.
¡Qué tarde más intensa y agradable nos ha proporcionado!
Lucia es un encanto.
Han pasado dos horas y parece que nos conozcamos de siempre.
Nos intercambiamos teléfonos y correos y un abrazo de despedida.
¡Qué tarde más intensa y agradable nos ha proporcionado!
¡¡¡¡¡Gracias Lucía!!!!!
Hoy lunes
29, volvemos a coger el bus 27 y nos vamos al centro, sin Lucia, que pena....
Paseamos largamente por
todo el centro hasta mas allá del Porto Veccio, que está en la otra esquina de
la ciudad, recorremos durante casi dos horas el paseo marítimo y las
callejuelas del casco histórico.
Parece que hoy era día de colada, en todas las
casas colgaban las sábanas y ropa de los balcones con olor a suavizante.
La
gente sentada en los portales conversando o jugando a las cartas, haciendo
“orecciette” (pasta típica), o cosiendo redes.
Muy pintoresco.
Muy pintoresco.
Volvemos y cerca del puerto comemos una pizza.
Nos vamos
a buscar la maleta de María Angeles que
hoy tiene vuelo a Barcelona a las 17:00
y mañana ya trabaja.
Un Taxi que nos recoge en el Cantieri y por 23 euros nos lleva al aeropuerto.
Dejamos a M. Angeles en el control de acceso y nos despedimos.
Un Taxi que nos recoge en el Cantieri y por 23 euros nos lleva al aeropuerto.
Dejamos a M. Angeles en el control de acceso y nos despedimos.
Del
aeropuerto cogemos un bus para volver.
En un momento que hay aglomeración , me noto algo..., me pongo la mano en el bolsillo del pantalón donde llevo la cartera ¡¡¡¡ y me encuentro con otra mano !!!!
Le doy tirón sujetándome la cartera y me giro para mirar quien era el “chorizo” que, sin inmutarse, aprovechando la parada, se baja del bus rapidamente como si nada hubiese ocurrido.
¡Qué mal rato he vuelto a pasar!
En un momento que hay aglomeración , me noto algo..., me pongo la mano en el bolsillo del pantalón donde llevo la cartera ¡¡¡¡ y me encuentro con otra mano !!!!
Le doy tirón sujetándome la cartera y me giro para mirar quien era el “chorizo” que, sin inmutarse, aprovechando la parada, se baja del bus rapidamente como si nada hubiese ocurrido.
¡Qué mal rato he vuelto a pasar!
Ya es la segunda vez en pocos días que nos
escapamos de un intento de robo.
Me está quedando un mal sabor de Italia en este aspecto.
Está visto que tener cara de turista es realmente peligroso en este país.
Me está quedando un mal sabor de Italia en este aspecto.
Está visto que tener cara de turista es realmente peligroso en este país.
Com no us han de veure cara de turista si només esteu tot el dia menjant pizzas jeje a veure ara que s'ha quedat sola la capitana si la tracteu be. Us teniu que comprar un cinturó amb compartiment per la documentació i els diners, això es el que porta l`Òscar a més en alguns llocs han arribat a porta un mòbil de pega dels vells. A veure si no teniu més ensurts. Les fotos molt bones ajuden molt a les explicacions. Petonets.
ResponderEliminarAvui ja estem a Croacia, hem aconseguit amarrar a una boia al centre del port de Hvar. Esperem que aqui no passin aquestes coses. Hem estat mitja tarde de tramits policials per que ens autoritzin l'entrada al pais i encara tenim que tornar dema al mati.
EliminarTurista, no, guiri.
ResponderEliminarDejate bigote pareceras italiano, o tampoco.
Vigila que a la tercera te quedas de indocumentado.
Disfrutad a pesar de todo.
Esperemos que todo quede en una anecdota. Esta tarde hemos llegado a la isla de Hvar en Croacia y hemos conseguido una boya justo en el centro del puerto.
EliminarEn Hvar, Croacia?.
ResponderEliminarUs seguim amb admiració, curiositat i certa enveja, sobretot per les fotos d'aquests llocs tan preciosos que esteu descobrint. Petons per tots, i endavant, que ja ha passat un més!
ResponderEliminarHola Angels, es la primera vegada que fem un relat d`aquest tipus.
ResponderEliminarTot i que ens ho pasem bé, també tenim algun mal rato.
Una abraçada.